Palabra Semanal 22
Nosotros fuimos creados por un Dios que nos hizo a su imagen y semejanza.
La única manera de vivir a la altura de cómo fuimos creados, es a través de nuestra fe.
Ahí es cuando comenzamos a entender que nuestra fe debe crecer, expandirse hasta llegar a abarcar todo nuestro ser (todo lo que somos).
De esa manera podremos vivir el plan sobrenatural de Dios. Él decidió usar gente como nosotros y eligió depositar en cada uno de sus hijos su unción y poder, para cumplir de esta manera el propósito de nuestra vida y para ser de bendición para otros.
No hay tiempo que perder, el mundo nos necesita. Hay gente sufriendo a nuestro alrededor y nosotros somos la respuesta de Dios para ellos.
Oremos fervientemente y pidamos que nos sea dada una fe… al límite.